Stefan Brüggemann, Philippe Decrauzat, Martina Klein, Adam Pendleton
12 May – 30 July, 2016
Parra & Romero se complace en presentar Accrochage, una exposición colectiva en la que se muestran piezas de Stefan Brüggemann, Philippe Decrauzat, Martina Klein y Adam Pendleton. Estos cuatro artistas ponen en común sus distintos puntos de vista elaborados con un repertorio universal de códigos y signos, tomados siempre de la cultura visual contemporánea y los movimientos de vanguardia.
Stefan Brüggemann trabaja sobre el lenguaje con un particular acercamiento al texto, combinando un proceso formal del concepto con una actitud radical y crítica. Como una perfecta reflexión del mundo, el quehacer artístico de Brüggemann se refiere a los hechos que nos rodean, siguiendo las construcciones del Negativismo. Su obra, a veces, se refiere a los desencantos de nuestra sociedad y provoca que el espectador se enfrente a sí mismo.
Las dos piezas que se recogen en la exposición manifiestan el interés por la ironía, la cual es constante en la obra de Brüggemann. Ambas representan la tensión entre original y copia, unicidad y reproductibilidad, siempre presente a través de sus piezas en una gran variedad de medios.
La obra de Philippe Decrauzat sigue la tradición de la escuela de abstracción suiza, que continúa las estrategias de vanguardia de los años sesenta y setenta. Decrauzat une a esa tradición con otras influencias que el explota: la deconstrucción del utopismo del Constructivismo Ruso, las distorsiones formales del Op Art y la geometría del minimalismo. De particular interés para él son las cuestiones formales que surgen de la transferencia de imaginería de un medio a otro, incluyendo los errores e imperfecciones que a menudo resultan de la reproducción impresa de las obras de arte.
La composición de los tres cuadros presentados en la exposición en tres registros horizontales es similar a la del marco cinematográfico. También alude a la obra de Blinky Palermo. Con ellos, Decrauzat explora la expansión de la pintura más allá de los límites del lienzo y los transitorios e inestables límites de la percepción. Él estudia la relación entre la obra y el espacio expositivo. El efecto velado evoca una sombra, un movimiento que continua en la superficie del lienzo y que uniría todas las pinturas como un carrete de película.
Para Martina Klein la composición no se formaliza en la pintura sino en el espacio. Los dos monócromos presentados hacen una coreografía de planos de colores definiendo el espacio y dándole carácter. Estas obras, realizadas con varias capas de pintura, no permanecen en un único plano sino que se mueven en el espacio con una proyección más o menos amplia, produciendo un volumen que se enfrenta y conecta con los volúmenes del entorno. El observador enfoca en el espacio, con su movimiento, los colores y distancias. El desplazamiento provoca la percepción de sus relaciones.
El objetivo de Klein no es el de crear instalaciones complicadas, pensadas de la manera más cuidadosa, sino el hacer posible la experimentación en el espacio, donde uno se mueve sin arreglos jerárquicos. La composición se estructura topográficamente, no responde a la idea del mundo métrico.
Adam Pendleton es un artista conceptual estadounidense conocido por su práctica multidisciplinar, donde utiliza pintura, serigrafía, collage, video o performance. En sus proyectos, Pendleton investiga el potencial de la lengua para dar forma a las piezas. Todo ello con la intención de hacer una re-contextualización de la historia a través de imágenes apropiadas, para establecer interpretaciones alternativas del presente y, como el artista explica, “una dinámica del futuro en el que puedan existir nuevas narrativas históricas y significados “.
La pieza presentada en la exposición pertenece al conjunto de obras tituladas Black Dada. El tomó el nombre y las inclinaciones estéticas, de el poema Black Dada Nihilismus, escrito por el poeta beat Amiri Barak, en 1964. De la misma manera que Barak, Black Dada no tiene una definición establecida por Adam Pendleton. La pieza también está relacionado con el movimiento de vanguardia de 1916 y con la ideología de Hugo Ball.
Stefan Brüggemann (México, 1975) vive y trabaja entre Londres y México D. F. En 2016 tendrá exposiciones individuales en el CGAC, España, y Hauser & Wirth en Nueva York. Ha expuesto recientemente en Contemporary Art Gallery, Vancouver, Canadá, 2014; Museo Jumex, México, 2013; The Netherlands Architecture Institute, Rotterdam, Holanda, 2013; Jeu de Paume, París, 2013; Bass Museum, Miami Beach, 2012; Museo d’Arte Contemporanea, Roma, Italia, 2012; Museo Tamayo, México D.F., 2012; Mies van der Rohe Pavillion, Barcelona, 2011; M HKA, Amberes, Bélgica, 2011; Fundação Serralves, Porto, Portugal, 2010; Villa du Parc, Anemasse, Francia, 2010; Kunsthalle Lissabon, Lisboa, 2010; Kunsthalle Bern, Suiza, 2008.
Parra & Romero is pleased to present Accrochage, a group show featuring pieces by Stefan Brüggemann, Philippe Decrauzat, Martina Klein and Adam Pendleton. At the exhibition these four artists are putting together his positions with a universal repertoire of signs and codes taken from the contemporary visual culture and the avant- garde movements.
Stefan Brüggemann works on the language with a particular approach to the text, combining a formal process of the concept with a radical and critical attitude. As the perfect reflexion of a world, Stefan Brüggemann’s work relates to the facts that surround us, following the constructions of the Negativism. His work, sometimes, refers to the disappointments of our society, letting people facing themselves.
The two works featured manifest the interest for irony, which is a constant in Brüggemann’s oeuvre. Both represent the play between original and trace, uniqueness and reproductibility, which is evident throughout Brüggemann’s work in a variety of media.
Philippe Decrauzat’s work follows the tradition of the Swiss school of abstraction who is continuing the avant- garde strategies of the 1960s and 1970s. Decrauzat expands upon that history through the wider influences he mines: deconstructing the utopianism of Russian Constructivism, the formal distortions of OpArt and the geometrics of Minimalism. Of particular interest to him are the formal issues that arise in the transference of imagery from one medium to another, including the mistakes and flaws that often result from the printed reproduction of art works.
The composition of the three paintings presented in three horizontal registers in turn is similar to the cinematic frame, or to a painting by Blinky Palermo. With them, Decrauzat explores the expansion of painting beyond the limits of the canvas and the transitory and unstable limits of perception. He studies the relationship of the painting to its presentation space. The veiled effect evokes a shadow, a movement that would run on the surface of the canvas and which, beyond the intervals between them, would link all the paintings together like a reel of film.
According to Martina Klein the composition is not formalized in the painting itself if not in the space. Both monochromes make choreography of colour planes defining the space and giving character. The multi-layered works do not remain in a single level but rather move into the gallery space with a more or less wide projection. These works made with several layers of paint, do not remain in a single plane but move in space with a more or less wide projection, producing a volume that faces and connects with the volumes of the environment / in the surroundings. The observer focuses on the space, with its movement, colours and distances. The displacement causes the perception of their relationships.
Klein’s aim is not to create complicated installations, designed in the most careful way, if not to enable experimentation in space, where one moves without hierarchical arrangements. The composition is structured topographically and does not respond to the idea of the metric world.
Adam Pendleton is well known for his multi-disciplinary practice that includes painting, publishing and performance projects that investigate the potential of the language to shape subjects. All with the intention of making a re-contextualization of history through appropriated imagery to establish alternative interpretations of the present and, as the artist explained, “a future dynamic where new historical narratives and meanings can exist”.
The work presented at the show belongs to a body of works titled Black Dada. He took the name and the aesthetic proclivities ideas, from the poem Black Dada Nihilismus, written by the Beat poet Amiri Barak in 1964. Like Barak uses in his poem, Black Dada has no set definition for Adam Pendleton, which is part of the point. Dada is also relates with the avant- garde movement and with the ideological Hugo Ball’s 1916 Dada Manifesto.
Stefan Brüggemann (Mexico, 1975) lives and works between London and México D.F. In 2016 he will have solo exhibitions in CGAC, Spain, and Hauser & Wirth in New York. He recently exhibited at Contemporary Art Gallery, Vancouver, Canada, 2014; Museo Jumex, México, 2013; The Netherlands Architecture Institute, Rotterdam, The Netherlands, 2013; Jeu de Paume, París, 2013; Bass Museum, Miami Beach, 2012; Museo d’Arte Contemporanea, Roma, Italy, 2012; Museo Tamayo, México D.F., 2012; Mies van der Rohe Pavillion, Barcelona (2011); M HKA, Amberes, Belgium (2011); Fundação Serralves, Porto, Portugal (2010); Villa du Parc, Anemasse, France (2010); Kunsthalle Lissabon, Lisboa (2010); Kunsthalle Bern, Switzerland (2008).